El 18 de marzo de 2021, la Cámara de Representantes aprobó la Ley del Sueño y la Promesa (Dream and Promise Act), una amplia legislación que proporcionaría una vía hacia la ciudadanía a más de 3 millones de inmigrantes indocumentados, incluidos jóvenes, soñadores, agricultores y titulares de TPS.

La legislación se aprobó en gran medida siguiendo líneas partidistas, con los demócratas a favor y los republicanos en contra.

Los proyectos de ley son más limitados que el paquete integral de inmigración presentado en febrero con el apoyo del Presidente Joe Biden. Aun así, su aprobación en el Senado se antoja difícil, ya que 10 republicanos tendrían que votar con cada uno de los demócratas para aprobarlos.

Según la legislación, unos 2,5 millones de «Dreamers» podrían acogerse a esta vía. En la actualidad, no existe ningún proceso de ciudadanía para los «Dreamers». Concedería el estatus de residente permanente condicional durante 10 años y cancelaría los procedimientos de expulsión si las personas cumplen ciertos requisitos. Esos requisitos incluyen estar físicamente presente en Estados Unidos el 1 de enero de 2021 o antes, tener 18 años o menos en la fecha inicial de entrada en Estados Unidos y no haber sido condenado por delitos como violencia doméstica, agresión sexual o trata de seres humanos.

El proyecto de ley también incluye protecciones y una vía a la ciudadanía para las personas que eran elegibles para el Estatus de Protección Temporal (TPS) en o antes del 17 de septiembre de 2017, y las personas que tenían estatus de Salida Forzada Diferida (DED) a partir del 20 de enero de 2021. Las personas que sean beneficiarias de cualquiera de estos programas y hayan permanecido en Estados Unidos durante tres años antes de la entrada en vigor de la ley podrán acogerse a las protecciones y a la vía hacia la ciudadanía.

Si este proyecto de ley fundamental se aprueba en el Senado, podría acabar concediendo la ciudadanía a millones de personas, ¡y esas son excelentes noticias!